La restauración de un ministerio perdido

Se hace indispensable en este tiempo en que Dios nos permite vivir, últimos tiempos de la gracia quizás, tener a mano tanto los predicadores como los laicos, el ejercicio de los ministerios que Dios dio a los hombres para la edificación del cuerpo de Cristo y el perfeccionamiento de los santos para la obra a la que fueron llamados.El desconocimiento de estas labores, puede afectar grandemente y hacer daño no solo a los escogidos sino a quienes han de venir, que están en lista de salvación en Dios.Es por esto que este material impreso, pretende llegar a cada lector como una guía para el emprendimiento y desarrollo del ministerio de la restauración, perdido por muchos y poco ejercitado por otros.No obstante, no se pretende presentar como el todo, sino como una parte vital y de mucha importancia en el desempeño ministerial.