Si conocieras el don de Dios

No se puede amar lo que no se conoce. El problema de la Iglesia católica no es el vacío de sus templos cada domingo, sino el vacío mental de las personas que llenan sus templos. Ya no basta simplemente creer. Es necesario saber en qué se cree y por qué se cree. La fe busca razones para creer, porque el acto fe no es una acto irracional. Francisco Armengol explica de forma concisa, sencilla, profunda y argumentativa la Fe católica contenida en la oración del CREDO. Responde no sólo al QUÉ CREEN los católicos, sino también al POR QUÉ CREEN LO QUE CREEN, tratando de ofrecer respuestas a los interrogantes y dudas que tienen las personas de la calle. El hombre es un ser en búsqueda de sentido. Jesucristo es el único que nos ofrece una respuesta total, a 360 grados, sobre el sentido último de nuestras vidas. Profundizando en el contenido del Credo, uno descubre el maravilloso tesoro que Cristo nos ha revelado. La Fe no sólo tiene sentido, sino que además nos da sentido. Creer no significa adherirse fría e impersonalmente a una doctrina que en nada toca nuestras vidas cotidianas; significa descubrir a una Persona que nos ofrece la respuesta más fundamental de nuestra existencia.